lunes, 13 de agosto de 2012

El Caníbal de la Alsacia.

Octava prueba del campeonato WRC, disputada en tierras finlandesas, 3 etapas, 18 tramos para completar un total de 303 kilómetros, situando su central en Helsinki.  Prueba que como no podía ser de otra forma viene siendo dominada normalmente por los pilotos escandinavos, si bien, Loeb ha podido irrumpir en ese palmarés en dos ocasiones, la última el año pasado.


 En esta prueba los Ford tenían la imperiosa obligación de recortar las diferencias con Citroën, pues Solberg se encontraba ya a 55 puntos en la clasificación general del líder Sebastien Loeb.

Destacar ya los problemas de Neuville en el tramo de clasificación que le llevo a solicitar la ayuda de los espectadores para poder continuar tras realizar un trompo. Loeb se alzó con el triunfo en este tramo y decidió partir en décima posición en la primera de las etapas, mientras que el resto de favoritos decidieron hacerlo inmediatamente tras él.


El primer día se comprendía únicamente de 3 etapas en las que se cubrirían apenas 30 km.
Loeb salió decidido a marcar el ritmo en los primeros tramos y llevo su DS3 a un ritmo alto  con una conducción muy fluida y sin errores, mientras que los finlandeses Hirvonen y Latvala salieron algo más relajados en este ultrarrápido rally y cedieron algo de tiempo frente al francés, que acabó el día como líder, aventajando en 7.3 segundos a Hirvonen y Latvala y en 7.5 a un sorprendente Otsberg, aunque relativamente, recordemos que se alzó con el triunfo en Portugal tras las descalificación de Hirvonen.

El Viernes, en la segunda etapa del Rally 9 tramos y 134 km aguardaban a los participantes, y ya en el primero de los tramos del día Loeb confirmaba que iba a vender caro el triunfo ampliando ligeramente al ventaja frente al dúo de finlandeses. Por su parte, Solberg se colocaba ya en cuarta posición a 10 segundos del líder. El fogoso ruso, Novikov sufrió un fuerte accidente, si bien pudo continuar hasta la asistencia tuvo que decir adiós a cualquier opción de lograr un buen resultado en la prueba.



Solberg sabía que sus opciones por pelear presionar a los Citroën en el mundial pasaban por acabar aquí por delante de ellos y apretó fuertemente en los primeros tramos del día, pero pronto cedió algo de tiempo de nuevo y tras el octavo tramo se mantenía en cuarta posición a 18 segundos de Loeb, que mantenía un rédito de 5 segundos frente a su compañero de filas y principal rival este año, de la misma forma que lo fue el pasado, si bien con matices diferentes como es lógico. Latvala seguía anclado en tercera posición para a 15 segundos de Sebastien.



Así pues, tras una hora prácticamente de tramos cronometrados Loeb dejaba claro que no había venido a Finlandia a conservar su renta sino que quería encadenar su segundo triunfo consecutivo en la prueba.

En los últimos tres tramos de la jornada Hirvonen intentó acercarse a su líder de filas, cosa que consiguió tras los tramos 10 y 11, pero en el último del día el dorsal número 1 dejó las diferencias tal y como estaban, es decir, en 5 segundos.

Así pues de cara al última día las espadas estaban en todo lo alto de cara al triunfo, si bien, en esta ocasión con una notable diferencia, y es que los hombres de Ford no habían cometido errores, pero pese a ello, no pudieron seguir los hombres de la marca francesa y se tendrían que conformar con jugarse la tercera y cuarta plaza en la última de las etapas, y esperar, un inesperado regalo de los hombres de Citroën, que plasmamos ya, no se produjo.



Destacar también, el abandono, tras accidente, de Neuville a los mandos del DS3 número 8.
Sábado, fin de rally, tercera etapa, 6 tramos por disputar y dos luchas importantes que dilucidar, una por la victoria, nuevamente sin órdenes de equipo,  y otra por el tercer escalón del podio, si bien en el primero de los tramos del día las cosas empezaban a aclararse pues tanto Loeb como Latvala se afianzaban en primera y tercera posición respectivamente. Hacer mención al abandono de Block tras romper la suspensión de su Fiesta número 43 tras romper la suspensión delantera derecha al aterrizar de un salto.



Y así finalizó la jornada, y por ende la prueba, con un Hirvonen yendo al máximo que se topó con la alargada figura y mano de hierro del ocho veces campeón que lo mantuvo siempre en segunda posición, durante toda la prueba, logrando mantener el liderato desde el primero hasta el último tramo, dejando una nueva demostración de maestría para la historia en este WRC, con un pilotaje perfecto durante toda la prueba y sin cometer errores.

La Power Stage, y por tanto los 3 puntos extra fueron a parar a manos de Hirvonen, que pese a darlo todo y realizar un pilotaje perfecto no pudo derrotar en una preciosa lucha a su compañero de equipo, quien finalizó en tercera posición, adjudicándose por tanto un punto más, en este último tramo. Segundo en el tramo y recogiendo dos puntos fue Solberg, si bien, finalizó en cuarta posición la prueba tras el Ford de su compañero de equipo.

Otsberg logró la quinta posición seguido de Tänak y Rantanen quien a causa de un pinchazo se vio relegado a tal puesto.



Así pues, tras ocho pruebas, solo una debacle privaría de su noveno título consecutivo a Sebastien Loeb, pues Hirvonen se encuentra a 43 puntos en la clasificación general y Solberg a 67.
Próxima cita, en dos semanas, Alemania, y sin Ogier en un coche competitivo se augura un paseo triunfal para Loeb en tierras germanas.



                                        
Sergio.

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