Mucho se habla últimamente de la Formula 1 en cuanto las condiciones climáticas se tornan en adverso y la lluvia hace acto de presencia en el asfalto de los circuitos. Consecuencia ineludible a esto último parece ser la puesta en escena del fantástico Mercedes SLS amg, el “safety car”, en otras palabras.
Sobre el tema se oyen comentarios variopintos, los mismos reproducidos por periodistas supuestos expertos en la materia, tales como que los pilotos no son valientes, que si tienen que ir a treinta que vayan a treinta, que gane el que más arriesgue, que los circuitos no drenan, que Charlie Whiting (director de las carreras de F1, el que se encarga de sacar a pista el Safety Car) nos “joroba” el espectáculo…
Pues bien, en mi humilde opinión, TODO ES FALSO. La culpa recae una vez más, sobre la FIA y su “genial” reglamento, el cual se encargó de crear el parque cerrado y eliminar el warm up. Procedo a explicarme:
Hace unos años ya, se instauró el parque cerrado, que tiene como finalidad que los coches una vez conclusa la sesión de calificación no pueden ser prácticamente modificados para la carrera. La medida se tomó para reducir costes, con el pretexto de que los equipos erradicaran la creación de piezas exclusivas para calificación que retiraban en el momento de la carrera.
Esto tiene como consecuencia, junto con la eliminación del warm up (antes servía, ya que tenía lugar el domingo, para acabar de reglar el coche y dejarlo listo para la carrera, y como se producía un par de horas antes del inicio de la misma las condiciones climatológicas se podían predecir con mucha más exactitud) que los coches tal y como inician la sesión de calificación tomarán parte en la carrera, con los mismos reglajes, prácticamente. Únicamente se permiten pequeñas variaciones, como el ajuste de la inclinación de los alerones, rellenar el KERS, o realizar reparaciones si se ha sufrido algún desperfecto en la clasificación, es decir, cuestiones menores que poco modifican el comportamiento del coche.
Así pues, obviamente no se puede configurar un coche para mojado una vez iniciada la clasificación, y si el sábado la clasificación fuera en mojada y la carrera del Domingo en seco, y obviamente los ingenieros reglaran el coche para seco, el sábado tendrían un gran problema.
Así pues, obviamente no se puede configurar un coche para mojado una vez iniciada la clasificación, y si el sábado la clasificación fuera en mojada y la carrera del Domingo en seco, y obviamente los ingenieros reglaran el coche para seco, el sábado tendrían un gran problema.
Pues bien, sabemos de la extrema tecnología usada en estas máquinas, y por ende, la acuciante sensibilidad a los cambios tanto externos como de la propia configuración a la que están expuestos. Con esto vengo a referirme a que los reglajes de estos bólidos son diametralmente opuestos en condiciones de seco que en condiciones de lluvia.
Entre otras, las principales diferencias serían la altura del coche respecto al suelo y los reglajes de las suspensiones. Estos dos factores son esenciales, ya que un Formula 1 en condiciones de pista seca va literalmente pegado al asfalto, por lo que si introducimos el factor agua en la carretera nos topamos con que el fondo plano del coche, “la panza” va literalmente flotando sobre la pista y hace IMPOSIBLE la conducción, indiferentemente de los neumáticos que calce el automóvil. Y aquí no entra en juego ni la valentía de los pilotos ni el drenaje del circuito, simplemente tenemos una canoa a 250 km/h , incontrolable.
Ahora alguno puede estar pensando, pues bien, si el sábado se prevé la mínima probabilidad de lluvia para el domingo, que ajusten los reglajes para lluvia y se acabó el problema. Pues no señores, si después el líquido no hace su aparición, el resultado sería desastroso pues nos encontraríamos con un coche extremadamente lento que se hundiría sin remedio hasta el fondo del pelotón.
Por lo tanto, una vez nos encontramos con un problema en el reglamento, que debería ser solucionado de forma urgente, pues uno de los mayores espectáculos del mundo, como es el ver a estas máquinas sobre el agua se sume hoy día en un sopor de unas cuantas horas donde parece que veamos más un anuncio de Mercedes publicitando su coche que una carrera de Formula 1.
Sergio