jueves, 16 de agosto de 2012

Capítulo 3. El caballo equivocado.

El Mundial comenzó en Brasil, en el circuito de Interlagos, y la afición paulista, la gran mayoría desconocedora de los problemas de la nueva máquina de su ídol,o esperaba con ansia la victoria de su piloto a los mandos de su nuevo Williams.



El fin de semana empezó bien para el tricampeón, pues marcó los mejores cronos tanto en los libres como en los entrenamientos oficiales del sábado, adjudicándose así la primera "pole" de la temporada, por delante de Schumacher, su compañero en Williams Damon Hill y el piloto de Ferrari, Alesi.
 
Ya el domingo Senna logró mantener la primera posición y el Ferrari del francés Jean Alesi superó al Benetton de Schumacher y a Hill, colocándose en segunda posición y haciendo "tapón"a ambos , lo que permitó al piloto brasileño escaparse en primera posición.

Un par de vueltas más tarde Schumacher logró adelantar al bólido rojo y la diferencia con el Williams se redujó de 4 a algo menos de 2 segundos en el momento en el que ambos encararon los boxes para realizar el primer pit stop de la carrera. Una gran parada del equipo Benetton, y quizá otras artimañanas que no es lugar este para comentar ( si a alguien le interesa mucho podemos dedicar un artículo a la polémica sobre el B194 de esa temporada), hicieron que el piloto germano saliese en primera posición y que el brasileño tuviere que conformarse con observar la zaga del Benetton.

La diferencia fue creciendo a medida que la prueba trascurria, los segundos inexorables se ampliaban entre el aspirante y el campeón, hasta que incapaz de seguir el ritmo, Senna, en la vuelta 56, se salía de la pista al acelerar su coche en exceso a la salida de la curva Junçao, un error, que le costó el primer cero de la temporada. Era extraño que Senna cometiera ese tipo de errores, pero como dijimos, lo que poca gente sabía es que aquel automóvil, supuestamente ganador, no era tal, y más en un circuito tan ondulado como es el del Interlagos. Como el propio Senna declaró: “Corri para ganar, el segundo puesto casi no importaba, ni a mi ni a toda esa gente en las tribunas”. La ambición pudo esta vez con el brasileño.



La segunda prueba del año era el GP del Pacífico, en el circuito japonés de Aida, un trazado que no beneficiado en nada el diseño de Newey para con el FW16, pues las ondulaciones del trazado complicaban el manejo del vehículo. Pese a esto Senna logró la "pole" por delante de Schumacher, pero el Domingo el restulado iba a ser aún peor que en el pasado GP de Brasil.

En primer lugar llama la atención que la vuelta de calentamiento se disputara siguiendo el ritmo del Safety Car algo muy criticado posteriormente por los pilotos, en especial por Senna, puesto que el ritmo impuesto por el Safety no permitió mantener los frenos calientes a los participantes. 

Al llegar a la primera curva, Hakkinen tocó por detrás el Williams del brasileño, con la suficiente intensidad para que este trompeará y chocara a su vez con el Ferrari de Nicola Larini. Nuevo cero para Ayrton y plácida victoria para Michael. 


Minuto 3:40 para ver el accidente.

Así pues, tras las dos primeras carreras, poca gente era conocedora, como ya hemos dicho de los problemas de Senna para manejar ese monoplaza y no tuvieron en cuenta el infortunio en la salida del GP del Pacífico, lo que veían, en cambio, es que Senna había cumplido su objetivo, pilotar un Williams, y que ese coche debía de darle su cuarto entorchado, y en vez de encaminarlo hacia ese objetivo, tras dos carreras, su casillero marcaba cero puntos, mientras que su principal rival, con dos victorias consecutivas, Michael Schumacher, se disparaba hasta los 20 .


La presión para el equipo Williams era alarmante, pues todo lo que Frank Williams había pedido de Renault y de los patrocinadores, especialmente de Rothmans, le había sido concedido. Senna era muy caro para las cifras que se manejaban en aquella época, casi 20 millones de euros por temporada era sus emolumentos y los resultados no estaban en concordancia con las espectativas ni las exigencias para el equipo. La presión para Senna era también infernal, y tal como él mismo declaró, su mundial debía empezar en esa tercera prueba, el Gran Premio de Imola en el circuito Enzo e Dino Ferrari, donde los errores no tenían lugar y el único objetivo era la victoria. Por otra parte, en los últimos seis años, en dicha pista, sólo habían ganado los Williams o él , por lo que la tradición debía mantenerse.

Por tanto, ese 29 de Abril de 1994 empezaba el " fin de semana" que debía servir a Senna para dejar sus credenciales al título encima de la mesa, pero , desgraciadamente, la historia fue muy diferente.

Sergio.

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